Barcelona.- Este miércoles 14 de mayo fue sepultado José Francisco Hurtado Maricuto, el niño de 11 años que murió por una golpiza que le dieron dos vecinos adolescentes el día de las madres.
Desde la Escuela Julio Camejo, donde estudiaba y le rindieron un sentido homenaje póstumo, hasta el Cementerio Municipal de Barcelona, cientos de personas conformaron la caravana que lo acompañó a su última morada.
Escenas de dolor, se vivieron al sacar el ataúd custodiado por seres queridos y su madre de la casa signada con el número 22 de la calle Carabobo del barrio Brisas del Mar, para seguir el recorrido hasta la escuela y el cementerio.
El hecho que mantiene consternada a la población, sigue en investigación y los señalados de asesinarlo, dos jóvenes de 16 y 17 años, están detenidos y a la orden de las autoridades judiciales.